2008/03/18

Es la Cultura, estúpidos

Tengo que terminar de una vez mi libro sobre la Sociedad Telemática y sus descontentos, precisamente para poner en su lugar no a sus descontentos, sino a tanto papanatas con la boca permanentemente llena de empalagosos flujos y redes, pero que en muchas ocasiones no sabe ni de qué está hablando exactamente... Espero acabarlo antes de un año, pero como no tengo mecenas ni públicos ni privados, a saber.

Y es que día tras día me convenzo, más y más, de que en la balanza final quedan bastante equilibrados los enormes beneficios que para la humanidad supone el desarrollo tanto de nuestras extensiones orgánicas à la McLuhan, como de nuestra noosfera à la Chardin, y los efectos indeseados de la telematización. Osea, que no sé si acabaremos bien o mal, aunque toca vivir la evolución; no nos queda otra.

Uno de los mejores ejemplos de esa creciente ambivalencia nos lo da la Educación, contra la cual, en los últimos diez o quince años, se han perpetrado una cantidad eorme de estupideces telemáticas. Perpetradas (e insisto en lo de perpetradas), casi siempre, por gentes a las que sobraba ambición (empresarial, política, pecuniaria, o incluso moral) pero faltaba lo esencial para enfrentarse a la comprensión de cualquier fenómeno: cultura. Cultura libresca, de la que únicamente se adquiere leyendo, por mucho que el Chikiliquatre entre en casa del académico Preferentemente, todavía hoy, leyendo libros (aunque sea digitales).

¿A qué viene esto? Veamos... Hoy me desayuno on line con este reportaje (que no noticia, pues no es tal) de El Público: un profesor vasco (¿qué importará que sea vasco?) "sostiene en su tesis doctoral que, pese a la tecnología, el modelo docente es de hace 100 años". Así, como suena. Y ya sabemos qué es lo que pasa cuando algunos periodistas titulan, pero es que es lo que sostiene la tesis. Una tesis con veinte páginas de marco teórico; dos hipótesis que no son hipótesis, sino preguntas propias de un brainstorming de marketing; y con una investigación basada en sintetizar documentos oficiales vascos sobre la implantación de las TIC's en la Educación Secundaria, y una base empírica soberbia: ¡13 entrevistas!, no a profesores, sino a técnicos y cargos políticos. Claro que la tesis se lee no en un departamento de Pedagogía, ni siquiera de Sociología de la Educación, sino en uno de Comunicación Audiovisual y Publicidad, y el autor es ¡consultor de Marketing e Internet!.... El caso es que parece un publicitario con futuro, y a la vista de su curriculum estoy seguro de que podía haber hecho una tesis estupenda sobre las estrategias que los distintos actores responsables de la Sociedad Telemática y las TIC's en particular, utilizan para vender sus políticas informacionales. O podría haber profundizado en lo que más trata en su tesis, y haberla convertido en una tesis sobre diseño y gestión de sistemas TIC's orientados a la educación.. para leerla, claro, en un departamento de Organización de Empresas o de Ingeniería... ¡Pero es que ha hecho una tesis sobre el método de la Educación!

En realidad el debate sobre TIC's y Educación no ha hecho sino empezar, porque apenas sabemos nada todavía. No se están midiendo seriamente los efectos. No se está preguntando seriamente a los docentes (nosotros lo hemos hecho en Extremadura, y resulta que lo de los ordenadores en el aula no parece muy pedagógico, por ejemplo), ni se está prguntando inteligentemente a los discentes. Se mezcla sin orden ni concierto ideología con conocimiento (por ejemplo: el debate sobre el software abierto tiene una importancia social enorme, pero no tiene nada que ver con la Educación, sino exclusivamente con la producción de software; ya está bien de marear a la gente). Confundimos deseos con realidades (mi experiencia personal con la telematización de la enseñanza, tras dos ediciones del que fue el primer programa de doctorado virtual de Sociología en español, ya abandonado por cansancio, me ha provocado más dudas que convencimientos). En este asunto nos falta ciencia y nos sobra conciencia...

Por ejemplo... En mi casa hay varios PDA's en desuso. Sí, un despilfarro... Los podía donar a alguna ONG's y sentirme guay, pero la ideología me ciega: me resisto a aceptar que mis hijos no quieren leer libros digitales, sino en papel. Que usan el Myspace o el Hotmail para relacionarse, la Wikipedia para una información puntual, el Google para profundizar, pero siguen prefiriendo, desde niños, la celulosa para empapar su mente de Cultura en mayúsculas. Y ahí están los PDA's, camino de su obsolescencia planificada...

Por volver al reportaje: el tesitando afirma en la entrevista que "A pesar de que durante los últimos 100 años han aparecido la radio, la televisión, los ordenadores e Internet, la escuela sigue basada en una tecnología muy concreta: la palabra impresa". Pero ¿por qué no se detiene un poco a pensar sobre eso: no estará considerando las NTIC's como una televisión más? ¿Y si es así, no es lógico que se estrelle cualquier intento de modificar la enseñanza, como durante cincuenta años se estrelló el sueño de la eseñanza televisiva?. La prensa añadió un potencial enorme a la Educación, y cambió el mundo; los telemedios primitivos (radio y tv) aportaron nuevos elementos, y volvieron a cambiar el mundo; las NTIC's van a hacerlo, de nuevo, y vuelven a cambiar el mundo, e incluso parece que van a provocar algo más: a crear una ficción de mundo paralelo. Y son ya por tanto, también, agentes de socialización como los mass media y la escuela. Productores de cultura.

Pero la Cultura con mayúsculas es otra cosa. Me temo (porque yo mismo llegué a creer que no) que sigue precisando de la celulosa. Pero sobre todo sigue precisando de la palabra del profesor culto con C. El problema es que cada vez hay menos profesores cultos con C, y más asesores de ventas.

(Osea 1: terminemos de rizar el rizo, en realidad la educación, justamente para la sociedad que estamos construyendo, es muy eficaz. El problema es si es esa la sociedad que deberíamos construir)

(Osea 2: la Sociedad Telemática, o será Culta, o será un infierno)

(Osea 3: el problema es que ahora debemos encontrar la síntesis dialéctia no de dos culturas, sino de cuatro: la Ciencia, el Humanismo, la Técnica y el Marketing..., del que probablemente fue el propio Snow el introductor en el debate)

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