Los humanos somos como ovejas...

...sólo si nos tratan como a ovejas. La verdad es que cuando los filósofos y sociólogos se ponen a decir tonterías destrozando conceptos operativos de las Ciencias de las Cosas terminan encontrando su Sokal de turno para ponerlos en evidencia. Gracias a él los postmodernos franceses han dejado de influir con sus pajas mentales durante unos años.... hasta que el avantguardista de turno los re-descubra dentro de veinte años.
Pero ¿y cuando los Científicos de las Cosas se ponen a decir estupideces sobre los comportamientos sociales?. Cualquiera que lea lo que los divulgadores científicos han difundido por ahí podría pensar, por ejemplo, que unos investigadores ingleses, especialistas en comportamiento animal (siempre los etólogos haciendo animaladas) han descubierto que, puestos en situación de masas, los humanos nos comportamos como los rebaños de ovejas. Así de simple... y tonto.
Hay que ir al artículo original (una prueba más de las tonterías que se publican en inglés, como decía ayer) para descubrir que lo que en realidad han hecho ha sido hacer que unos seres humanos se comportasen como si fuesen ovejas... y luego deducir, ergo, que se comportan como ovejas. Han puesto a grupos numerosos a moverse sin objeto por un espacio cerrado, y les han prohibido comunicarse entre sí. Luego han metido en medio a otros individuos (líderes según su comprensión del mundo animal) que sí tenían una dirección precisa, y han podido comprobar que, en general, la gente sin objetivo seguía de alguna forma a quienes sí tenían un objetivo claro. Menudo descubrimiento. Y doblemente tonto, porque en realidad las ovejas no se mueven sin objeto, sino a la búsqueda de alimento.

Addenda
Para no llamarse a error... No es que lo 'descubierto' por los etólogos sea incierto: si lo han observado, es. El asunto es que en lo decisivo queda absolutamente negada cualquier generalización a partir de un experimento irreal (en la medida en que no reproduce condiciones reales, como de hecho no puede reproducir ningún experimento societario). Y en lo poco que aicertan, ¡vaya!, es que ya estaba todo dicho hace más de cien años, con las ocurrentes (aunque a veces demenciales) observaciones de Le Bon sobre la inteligencia inferior de las masas, primas hermanas y coetáneas de las no menos interesantes de Tarde (por supuesto, recomiendo mi ensayito) sobre la mente grupal.